La fascitis plantar es una lesión por sobrecarga causada por la inflamación de la fascia plantar.
La fascia conecta el hueso del talón con la base del dedo gordo. El dolor de talón es más intenso por la mañana, aunque disminuye durante el día, puede aumentar con el esfuerzo.
Existen ejercicios de estiramiento que pueden ayudar a aliviar la fascitis plantar. Además, el dolor también puede tratarse con fisioterapia. En el post de hoy, hablamos de esta afección tan común y de los mejores tratamientos para aliviar el dolor.
¿QUÉ ES LA FASCITIS PLANTAR?
La fascitis plantar es un dolor en la planta del pie o en el talón que resulta especialmente doloroso por la mañana, al levantarse de la cama o después de un largo periodo de estar sentado o de pie.
Es una inflamación de una banda gruesa de tejido que recorre la planta del pie y conecta el hueso del talón con los dedos (fascia plantar). La fascitis plantar es más frecuente en los corredores. Sin embargo, las personas con sobrepeso y las que llevan un calzado con poca sujeción también corren un mayor riesgo.
CAUSAS DE LA FASCITIS PLANTAR
Normalmente, la fascia plantar actúa como un tendón en el arco del pie, absorbiendo los impactos y sosteniendo el arco. Cuando la tensión y la presión sobre el cordón del arco son demasiado grandes, pueden producirse pequeños desgarros en la fascia. Los estiramientos y desgarros repetidos pueden irritar o inflamar la fascia. En muchos casos la causa no está clara, pero en nuestra experiencia hemos identificado los factores que aumentan el riesgo de fascitis plantar:
- La edad. La fascitis plantar es más frecuente entre los 40 y los 60 años.
- Tipo de ejercicio. Actividades que ejercen mucha presión sobre el talón y los tejidos circundantes, como las carreras de larga distancia. El ballet y la danza aeróbica pueden contribuir a la fascitis plantar.
- La mecánica del pie. Pies planos, arcos altos o incluso un patrón de marcha anormal. Estos factores pueden afectar a la distribución del peso en los pies y aumentar la presión sobre la fascia plantar.
- Sobrepronación. La sobrepronación es el balanceo excesivo del pie y el tobillo con cada paso. La sobrepronación puede corregirse en muchos casos utilizando zapatos ortopédicos especiales para corregir el patrón de la marcha.
- Obesidad. El sobrepeso ejerce una presión adicional sobre la fascia plantar.
- Lugares de trabajo. Muchos trabajos requieren pasar muchas horas de la jornada laboral de pie o caminando sobre superficies duras. Hay que tener cuidado y realizar ejercicios de estiramiento, ya que esto puede dañar la fascia plantar.
- Calzado. Los zapatos de mala calidad, desgastados o mal ajustados también contribuyen al riesgo de fascitis plantar.
ME DUELE EL TALÓN, ¿QUÉ DEBO HACER?
Si el dolor que sientes es similar al descrito en este artículo, es posible que tengas fascitis plantar. No te preocupes, sigue estos consejos y ponlos en práctica para aliviar la fascitis plantar:
- Reposo: intenta descansar y dejar de hacer actividades físicas, sobre todo paseos largos y deportes.
- Hielo: puedes ponerte hielo en el pie durante 15 minutos.
- Auto-masaje: Cuando te levantes por la mañana, puedes masajearte el pie desde la planta hasta el talón.
- Fisioterapia: Es recomendable que la fascitis plantar sea tratada por un fisioterapeuta experimentado lo antes posible.
- Estiramientos: Hay muchos tipos de estiramientos. Uno de los ejercicios de estiramiento más comunes, que suele aliviar mucho el dolor, es hacer rodar el pie lesionado en una botella de hielo.